Practicar ejercicios Pilates-Centro de energía

Moverse sin tensión

Practicar los ejercicios de Pilates no significa tensar los músculos para ejecutar los ejercicios. Hay que aplicar los principios de Pilates para conseguir el objetivo. Tensar los músculos, aguantar la respiración y esforzarse por generar tensión continua, sólo provocarán un movimiento discontínuo, de escasa calidad y que posiblemente imposibilite alcanzar la meta final del ejercicio o la posición final.

Hay que identificar de dónde tiene que proceder el movimiento, ejercitarse en el umbral de capacidad y luego ir mejorando para alcanzar el objetivo final de un movimiento de calidad.

Ejercitarse empezando por el centro para progresar a brazos y piernas.

El centro de energía se compone de los músculos situados en torno a la columna lumbar, entre la base de las costillas y una línea imaginaria que cruce las caderas. El método Pilates se centra en músculos específicos para mejorar el concepto del centro de energía:
Recto del abdomen
Oblicuos del abdomen
Multifidus
Transverso del abdomen
Suelo pévico
Diafragma
Glúteos
Psoas
Estos son los principales músculos estabilizadores del tronco y de las extremidades inferiores.

El centro de energía se trabaja en todos los ejercicios de Pilates, ya que se consigue una base estable con la que ejercitarse, mejora la coordinación entre las áreas centrales del cuerpo y sostiene y soporta la columna vertebral durante el  movimiento.

El centro de energía secundaria se localiza en torno a la cintura escapular. Su función es estabilizar y mejorar la calidad del movimiento de las extremidades superiores durante los ejercicios.
Los músculos implicados son las fibras inferiores del trapecio, el serrato anterior, el dorsal ancho, los pectorales y los flexores internos del cuello.

El musculo transverso del abdomen es el principal centro de energía, es el músculo que se encuentra a nivel más profundo y cubre el abdomen, lo debemos activar al iniciar los ejercicios y mantenerlo activo en todo momento.




Localización del músculo tranverso del abdomen.
Acercar el ombligo a la columna vertebral, como si te subieras la cremallera de unos pantalones ajustados, esta activación se practica con la columna vertebral neutra, eso es manteniendo nuestra curvatura natural.